jueves, 28 de marzo de 2013

Criar con apego ¿cansa?

Hace unos días una compañera me dijo: eso que ud hace con nenita es muy lindo, pero es cansado y no creo que lo haga con un segundo o tercer hijo. Y entonces pensé, claro que es cansado criar con apego.
Estamos acostumbrados cómo sociedad a buscar el mínimo esfuerzo en el trabajo, en la viday en las relaciones, pero al criar con no estamos concentrados en nuestras necesidades de adultos,  no requerimos artilugios que nos venden para facilitarnos la vida a los padres y vivimos la experiencia de la maternidad y paternidad de una manera intensa física, mental y socialmente.
Mi primer gran reto en la crianza con apego fue un embarazo al ritmo de nenita: descansar y alimentarme para su bienestar, cuidar la ingesta de azúcares y privarme de una copita navideña era mi primer regaló para mi hija. Después vino un nacimiento respetando su ritmo, dónde los tres participamos respetuosamente, dándole prioridad a nenita. No pudimos calendarizar el nacimiento según nuestras necesidades, no nos acomodamos a mi tiempo o el del médico y pasamos las 60 horas ahí, sin poder hacer nada más que lo que mi cuerpo requería para traer vida al mundo.
Una vez que  nació vino la lucha por amamantar: no es luchar con las tetas, la posición del bebé o la bajada de la leche sino contra los comentarios desde el hospital: no le de cada rato teta o ser acostumbra a estar exigiendo, póngale horario cada dos horas, dele fórmula para que duerma más... Y las visitas que importunan con historias sobre lo cansado y esclavo que es dar teta, con las bondades del chupón para dormir, para tener chance de limpiar y los miles de consejos no solicitados sobre dar teta.
Después estuvo la faena de andar la bebé en brazos: mujer que no descansa una nada y ellos se mal acostumbran, se va a volver consentida, usted es muy apegada y cuando vuelva al trabajo le va a costar, no alcé tanto a bebé que se va a volver manipuladora.  Y sí, con una gorda de diez meses y diez kilos una se cansa, pero no es que me muera, porque repartidos en la bandolera ni la siento. Y este otro que cansa más que un maratón: portear al bebé. Porque entre los nudos del fular y las argollas de la bandolera se enredaron tantos: parece india, eso  va a ahogar la bebé, se ve que está incómoda, usted está jorobada, esta tela no va a sostener la bebé y el famoso: no va a caminar sí no la baja, no gatea por andar alzada, es una vagabundería...cansado, cansado, cansando.
Y sí, colechar me ha quitado horas de sueño pero más que todo por estar oliendo esa cabeza con lavanda y sudor de bebé que está a mi lado o ver esa paz con la que se acuesta mi nenita después de toda la energía usada en el día. Aunque también me quita tiempo explicar que no, que no estamos mal y que no nos precisa sacar a nenita del cuarto, ni la vamos a dejar dormir sola, y que tenemos vida sexual (bueno, no tanta) y que nos vale sí los demás no están de acuerdo que el cuarto, la cama y la nenita son muy nuestros.
Y ahora mismo estoy en un período agotador: póngala ya a caminar, en una andadera ya estaría igual a fulana corriendo, no está maciza (ni que fuera un muro!)   y el famoso: enséñele el método doman, que lea en seis idiomas, ya debería hacer...cansa, porque ella ya hace muchas cosas, todas adecuadas a su edad y según su ritmo. Seria muy agotador imponer, forzar, sobre estimular...muy, muy cansado.

Sí creo que cansa criar con apego sí una no está preparada para luchar contra muchas voces, so una no está firme en lo que su instinto le dice. ¿Volverlo a hacer? Todo igual,y sí se puede, mejor!! Puede que yo me vaya a dormir molida, pero tan feliz, que todo lo compensa.

lunes, 25 de marzo de 2013

Diez meses

Mikey Mouse canta la mousekemarcha mientras escribo. Nenita está bailando con sus manos en alto mientras aplaude, volteo a ver y me sonríe. Hoy cumple diez meses.
Ya pesa diez kilos y mide más de 70 cm, está estrenando cuatro dientes de arriba y tiene enormes deseos de morderme, creo que eso le alivia el dolor de noche y no encuentra mejor saca dientes que las piernas de mamá. Ha sido un mes difícil por los dientes, vinieron con diarreas, quemadura de pañal y desórdenes al dormir, pero pudo estar peor.
Desde hace un mes nenita gatea y ahora tiene una velocidad increíble, además de ser muy hábil para moverse. Mientras está de cuatro puntos se arrodilla y suelta las manos o levanta su culito y apoya los dos pies. No se levanta parada aún pero está intentando hacerlo bien, igual no nos urge caminar aunque la gente siga presionando.
Cada día nenita aprende a expresarse mejor, si desea algo lo señala, lo pide gritando, o intenta en sus balbuceos hablar. Hace visos de hablar y ya dice mamá, papá, tata, gata, allá, agua, tita y teta. Teta además de acompaña de un chasquido de lengua muy divertido. Además hace palmas y dice adiós, tira besitos a su forma y tararea mientras está jugando (nivel de ternura, mil). Hace diálogos con nosotros y con otras personas, sobre todo le encanta decir que cumple un año levantando su dedito, esa es su técnica para derretir a todos.
Su apetito sigue genial, ahora bebe con pajilla y en vaso con asas, come todo con sus manos y es divertido verla hacer un puño, abrir la palma y comer pasando la palma por la boca, nariz y resto del cuerpo.  Hasta ahora solo el huevo no le gustó, come toda clase de frutas, verduras, carne, pan, granos, galletas.
Seguimos con la lactancia, ahora más espaciada por mi trabajo, en la mañana y noche es a libre demanda, pero ella se pone un horario, ya duerme la noche casi completa, solo se despierta una vez, o pasa directo si está cansada.
Después de ser insociable está más desenvuelta, le gustan los niños y los muchachos jóvenes (y guapos!!) En el parque grita feliz y señala a los chiquillos que juegan, aún no comprende eso de jugar con otros pero se divierte con verlos.
Faltan dos meses para su cumpleaños, pero sabe soplar y aplaude al ritmo del cumpleaños y llevaba ese dedo rechoncho si le preguntas cuantos añitos cumple. He dicho, mi nenita es un bombón!

jueves, 21 de marzo de 2013

No se aceptan niños

El domingo fuimos víctimas de discriminación familiar. ¿Cómo? Pues nos prohibieron ingresar en dos lugares por tener una bebé. Estábamos en la playa y decidimos por comodidad buscar un balneario, preguntamos a la policía turística y nos hablaron de un lugar nuevo y muy fino, apenas llegamos nos cerraron la cadena de entrada, sólo aceptan niños los lunes. Nos recomendaron ir al frente, resultó un hotel con nude pool donde la recepcionista me hecho peor que a un leproso.
Harta de que los dos lugares nos prohibieran el paso preguntamos a un taxista que llamó por radio, lo que nos dijo nos dejó patidifusos, en ésta playa (jaco) no se aceptan niños en las piscinas.
Después del golpe inicial a mi moral me entró una rabia e indignación ¿Desde cuándo ser padres nos convierte en parias?
Acá ya nadie quiere compartir con los pequeños, hay hoteles solo para gente adulta, balnearios sin niños, es casi imposible alquilar un apartamento sin el consabido no niños, no mascotas. Sí una va a un restaurante le asignan la peor mesa y siempre faltan las sillas altas, el transporte público no tiene asientos de bebé ni cinturones para niños.
Ésta cultura adultocentrista no recueda que los niños son humanos y que merecen respeto, los quieren confinar a lugares cerrados y donde «no molesten» a los demás.
Y se que estoy pagando mi insolente actitud pre nenita de odio a la niños, pero creo que hasta para mí, la hija de herodes como me decía una compañera, ya es mucho. Hace poco hablaba con abuelaencamino de que cada día hay más prohibiciones para las familias: el costó de la vida, la competencia laboral, la falta de espacio para entretenerse, y justo ahora que soy mamá y me pasa esto siento que los adultos no sabemos compartir porque nos hicimos egoístas pensando que sólo nuestros intereses son verdaderos. Por eso usamos frases como eso no es nada, es una cosa de niños y ya se le pasará...se competa cómo un bebé, etc.
No se que clase de personas estará formando esta sociedad, pero sí se  que si no me va a aceptar con mi hija, no quiero yo pertenecer a ella.

viernes, 15 de marzo de 2013

Soy nenita

Hola! Ya me conocen, mi mami escribe acá mis intimidades con el alias de mamáencamino y a mí me llama nenita. Tengo nueve meses y medio, soy una señorita grande aunque mi madre insiste en que soy bebé sólo porque no se caminar.
Pero es que así son las madres, no? La mía es bien necia: venga a bañarla, venga a dormir ya, no se coma la comida del gato, no coja la guitarra del tío. No se cómo pretende que aprenda a saborear la comida gourmet y tocar guitarra sí me está prohibiendo las cosas. Y es que ella todo el día anda detrás mío, está bien que seamos amigas pero que no me acose! Sí quiero ir al baño a ver los patos, ella llega con el pretexto de cuidarme, sí quiero ir a la puerta llega apenas toco el suelo y ya no se va más. Y no es que a mi no me guste pasar tiempo con ella, por ejemplo me gusta cuando después de bañarme llega a darme teta, o cuando se duerme dándome teta, o... momento, acabó de ver algo curioso, ella me gusta más cuando me da teta, que curioso detalle.
Y no me quejo mucho, es un poco loca mi mamá pero es que nadie le explico nunca cómo son las mamis y anda aprendiendo sobre la marcha, algunas veces me va mal con sus experimentos, como la vez que me corto un dedo con elcortaúñas o cuando me cayó protector solar en un ojo (ah no, ese fue papáencamino) aunque la mayoría del tiempo nos va bien. Cuando la veo asustada o preocupada porque no sabe que hacer le sonrío para calmarla, así se le baja la intensidad. A veces hace trampa y llama a la tita o viene a leer que dicen otras mamás, pero sé que lo hace de buena fe.
Mi mami pasa todo el día dándome besos, es muy lindo pero al rato yo ya quiero hacer otras cosas, como pellizcarla en el cuello o hacerle caricias en el brazo, a veces le pellizco las tetas con amor pero creo que le duele porque se pone seria y me dice no, y yo me quedo quieta, porque sí algo tiene mi mami es que nunca me regaña feo ni me pega, y yo le agradezco que sea tan educada haciéndole caso. Mami dice que hay bebés a los que les pegan, pero que ella solo tiene las majos para darme amor, así que cuando recibo una nalgada es cuando me dan golpecitos suaves en el pañal y me arrullan (que soy grande pero me gusta dormir así).
Cómo paso mucho rato con mi mami antes de que ella se vaya al trabajo nos divertimos mucho, ella me enseña a comer, a jugar, gatea conmigo y me cuenta todas sus cosas. Por las noches regresa muy tarde, pero como buena amiga yo la espero, a ella y a mis tetas, y apenas me ve se ilumina, me da teta que siempre es tan rica y me duerme pegada a su pecho donde yo se que no hay miedo, ni hambre ni frío y puedo soñar y ser feliz.

Ya me tengo que ir, creo que sospecha que estoy haciendo algo.
Besos a todos!

miércoles, 13 de marzo de 2013

Drama y consejos de maternidad

Me encantan los foros de maternidad, en ellos aprendí cosas básicas como recetas para papillas, trucos, aprendí del porteo...y ahora estoy hasta la coronilla de ver cómo las madres asustan a otras a través de sus comentarios.
Y les voy a contar los ejemplos que he visto de drama en la red, sobre todo en foros donde la gente puede decir y hacer alboroto por cualquier cosa:
1. Dar remolacha y espinacas envenenan la sangre: supuestamente produce hemoglobina en exceso y ahoga al bebé. En palabras de mi pediatra, tendría que comer kilos de espinaca y de remolacha al día, y más bien estos alimentos son geniales para evitar la anemia.

2. Dar agua al bebé le lava los electrolitos y lo envenena: entonces el agua ahora es mala? Prefiero pensar que no se lo creen. Una chica preguntó que si le podía dar un par de cucharadas de agua y ya le dieron ese susto.
3. No hay que frotar ungüentos alcanforados porque se acumulan en el páncreas: bueno, seguimos vivos no? Ya muchos nos frotaron en casa cuando teníamos gripe y que alivio daba, yo uso uno con alcanfor y suave para la piel de bebé.
4. Ya ni háblenos de dar alimentos, es decir mi bebé se comió una galleta y ya está condenada a la enfermedad celíaca, sí le doy leche en un postre va a ser intolerante de por vida, que sí el pescado, que si las frutas...ya lo he dicho, dejamos que un médico nos diga cómo alimentar y criar un hijo que solo nosotras conócemos, dejamos de oír el instinto y se nuevo atacamos a otras madres. Igual que debemos apoyar la lactancia deberemos ser juiciosas para hablar de la alimentación de los bebés.
Y así continúan las opiniones: mejor no portear al bebé porque yo conocí uno que se cayó de la bandolera (casi me da un infarto) no suena con el bebé que una amiga mía lo aplastó (sra, ya tenemos miedos, no nos de más) y una serie de peligros y miedos que se convierten rápidamente en miedos y dudas colectivas y ya entonces una día de su capacidad de hacer bien las cosas.

Yo tengo claro que este blog no está creado para aconsejar a nadie porque yo apenas voy en camino y tengo mis propias dudas, mis miedos y cometeré mis errores. Puedo compartir mis experiencias pero no soy quien para dar cátedra, yo creo en que las madres debemos volver a escuchar nuestro instinto y leer para entretenernos más y asustarnos menos.

lunes, 11 de marzo de 2013

la primera invitación de nenita

Hace una semana está ahí el papelito con la imagen de Mickey Mouse, nuestro amigo el Tomatito cumplía un año y se lo iban a celebrar por lo alto. Tomatito es un hermoso bebito hijo de la ex novia de papaencamino que ahora es buena amiga de los tres, que aunque al inicio no me hacía gracia, pues ahora sí nos llevamos bien.
La última fiesta infantil a la que yo fui resultó ser hace 18 meses,cuando la chinis cumplió dos. Pero era distinto, yo era la amiga de la madre que no tenía vela en el entierro así que ayudaba a la decoración, a terminar el resto de detalles y me fui antes de cortar el pastel. Y antes de esa, mi experiencia en fiestas de bebés era limitadísima. 
Pero ahí ibamos hoy los tres: la nenita ataviada con su vestido más delicado (con tutú en la falda y lentejuelas rojas) mamaencamino con su traje de madre que aún está joven y quiere verse bien sin exagerar:zapatos bajos de cuero pero con detalles calados, jeans semi estrech que pueda permitirme agacharme a recoger a la nenita y blusa que tape lo que no quiero enseñar pero que deje dar de mamar y que el color me favorezca... duro como treinta años escogiendo el look, pero hay que salir decentes, no sea que pienses que mandé a la chacha con la bebé y el marido. Papaencamino ya podría ir con un saco de papas y aún así estaba tranquilo, eran sus amigos de la vida, así que lo conocen y saben que no hay vida humana que le haga ponerse zapatos de vestir los fines de semana (o por decir, nunca).
Como era una fiesta entre bebés había bastantes mamás y abuelas, con el consabido y siempre no muy bien recibido diálogo de fiestas (imagino que se repite infinitamente): 
Sra- que linda bebé, cuanto tiene?
MC- Nueve y medio.
Sra- Y ya camina? la mía con un año ya se soltó a caminar, y es terrible, ella todo lo sabe.
MC- Ah no, ella va despacio a su tiempo.
Sra- Pero se ve que es muy inteligente
MC- (por compromiso) Ay pero la suya se ve que es vivísima.
Sra- Acá insertan una serie de hechos sobre lo que hace, come, dice, etc la o el bebé de marras.
MC- Como una lora, igual dice que hace Nenita, es algo como un listado: ay sí, nosotros le enseñamos a soplar y cantar cumpleaños, capaz que no llega a cantarlo en el cumpleaños asustada (sople Nenita para que la sra vea... nenita está viendo una hormiga y no sopla) y dice cuantos añitos cumple (hagale nenita... nenita intenta coger un vaso y regarmelo encima). Y ya sabe hacer... y Nenita negada a cualquier demostración, hace todo apenas la sra se va a sentar con otra mamá y de nuevo se repite la misma charla, unas con otras aunque se vean a diario. Y nenita que recién se da cuenta de todas las indicaciones que le había dado empieza a aplaudir, elevar el dedo para decir un año, hace caras divertidas y sopla...ahora que nadie la está viendo.

Después viene el resto: pastel, el cumpleañero si es muy chiquito se asusta, algún otro chiquito quiere apagar la vela, alguien termina golpeado por un columpio-niño más grande-otra chiquita-mordido de perro, hay bolsas con confites para traer a casa y aunque nunca se las comen todas las mamás dicen: uy ahora se da gusto con los confites.

Y de esto me quedan como nueve años más!!! 

viernes, 1 de marzo de 2013

Lágrimas de niño

Estaba ahí, con su gabacha de preescolar haciendo fila desde hacía una hora. Su mamá estaba más interesada en la cháchara ajena mientras su papá cargaba al hermano pequeño. A él le encargaron cuidar el coche de su hermano.
Cómo era un niño pequeño el coche era grande para el, tenía que andar en puntas para poder llegar al manubrio.
Pasaron frente a nosotros y el niño se distrajo un segundo, golpeó con el coche sombrilla a su madre. Ella lo golpeó tres veces mientras el lloraba: perdóneme mamá, no la vi. ella le gritó y lo volvió a golpear con la mano mientras le decía, sí me vio y no lo perdono.
Mientras el niño lloraba todos nos sentimos mal, sus lágrimas eran de pena, su madre le decía que no lo iba a perdonar.
¿Era necesario tanto dolor por un simple golpe con un coche sombrilla? ¿Eran necesario hacer sentir al niño culpable?