jueves, 30 de enero de 2014

20 meses

Ya casi no tengo bebé! Nenita cada día es más una niña, ya quiere ser independiente y volar con sus alas imaginarias. Ya voy entendiendo por que a ésta etapa le dicen la primera adolescencia: quiere ser grande aunque todavía no sepa cómo, se niega a todo y puede tener una explosión en cualquier momento. Sólo espero poder sobrevivir  y prepararme para la adolescencia trágica!
Con 20 meses también vamos cerrando dentro de poco los reportes mensuales, no me veo escribiendo "con 43 meses, nenita"...yo creo que después de los dos años ya esta bueno eso de consignar la edad en meses, yo tengo 350 meses y mi mamá no lo anda diciendo por ahí.
Ahora tengo una hermosa nenita aferrada a una palabra, sí, esa que las madres llegamos a odiar... NO. ¿Te bañas con mamá o con papá? ¿Comes acá sentada o de pie en la silla? ¿Te pongo primero la ropa o te peino?  Así hablo todo el día siguiendo la fórmula que supuestamente ayuda a que nenita deje la etapa del no pero que no sirve un carajo! Esos expertos no contaban con que mi hija nació con un par de (me permito decirlo) cojones y una capacidad de hacer lo que le viene desde la soberana gana!!! Así que aunque le de opciones ella me vuelve a ver, pestañea indignada con sus ojos a medio bajar (la clara muestra de pedantería) y hace lo que se le ronca. Y ahí quedamos nosotros ante el mundo como un par de flojos, displicentes y demás aportes de otros padres que hubiesen resuelto todo con un par de nalgadas.
Y aunque hemos tenido más nos que nada, de pataletas y berrinches vamos con un conteo bajo, no hemos visto aún un berrinche serio aunque ya algunos malintencionados digan que nuestra beba es berrinchuda. Y me fascina, me llena de alegría cuando la gente voltea a vernos con los ojos desorbitados cuando nenita grita no, o llora, y me recuedan a mi misma hace cinco años y me tengo que comer todo lo que yo decía antes sobre niños malcriados y padres irresponsables. Toma karma!
Además de no, este mes nenita tiene la lengua floja y parece una tarabilla, repitiendo y agregando a la colección: cocó (cocodrilo) tictac (por el cocodrilo de jacke y peter pan) de mama/de papa (con sentido de pertenencia)  papi, tetica, bububu (meterse entre las dos tetas,y decur bububu con el fin de mamar) y un montón de onomatopeyas animales (chancho, vaca-toro, gato, pato, lapa, gallina). Hace mucho sonido y fonema primitivo preparándose para el habla, así que vamos despacio, cómo diría ella misma, en unooo, doooosh y,tes!
Cómo ella cambia de parecer cada dos días, ahora ama y ahora lavarse los dientes, dando por finalizadas las luchas grecorromanas qué teníamos para poder lavarle la dentadura casi completa qué tiene (sólo le falta un juego de molares).  Regresamos al baño en tina y no hay ser vivo qué la haga peinarse, no, no existe forma! Pero es muy divertido verla desnudarse y ponerse ropa, aunque algunas veces pareciera qué tiene un sentido inverso de la moda y quiera usar los calzones por sombrero.
De apetito no va mal aunque no va a ser gorda sí se mantiene de frutas y más frutas, estamos intentando comer con cubiertos y el tenedor no le da tanto problema. Con el vaso se atraganta un poco y sinceramente prefiero usarle uno entrenador, menos reguero, más tranquilidad en las comidas.
Nenita corre, intenta saltar con los dos pies, se tira de todas partes, sube, baja, escala, toca, prueba, ve, huele, escucha, repite...es una niña daba qué se esta desarrollando día con día y tiene a esta madre vuelta loca de amor.

domingo, 26 de enero de 2014

Al mundo laboral...en serio

Después de más de tres años de estar de baja por embarazo, maternidad y tomar un contrato de medio tiempo vuelvo al trabajo con todas las de ley.
La economía en casa estaba muy mal, el contrato que tengo para trabajar con el gobierno es sólo de seis meses año y después dependíamos del salario de papaencamino, quien llevaba un año trabajando con un sueldo mínimo. Estuve a punto de tomar hasta un trabajo en un restaurante de comida rápida cerca de casa, pero me sentí degradada cómo profesional y a última hora me acobardé.
A final de año tenía dos propuestas en la mesa, una casi fija y otra que era mi sueño hecho realidad, del colegio 1 me entrevistaron 4 veces y en la última me botaron cortésmente alegando que tenía mucha titulación y que no les aseguraba mantenerme en el colegio todo el año. En el colegio 2 me citaron después de una larga  y angustiosa espera desde inicio de año, de esas donde cada mensajes esperas que sea "el mensaje", y ahora entro el martes a dar clases al colegio donde siempre deseaba estudiar cuando era chica!
Así que después de veinte meses de dedicarme casi por completo a Nenita regresaré a trabajar tiempo completo y a estudiar un postgrado virtual. Sigo vinculada también al programa del gobierno así que tendré dos trabajos, pero me queda un espacio (de 3 a 6) para compartir con mi preciosa nena. No estaremos tanto tiempo juntas pero espero ser capaz de darle calidad de tiempo, y a pesar de tener un poco de nostalgia creo que tuvimos mucha suerte de compartir sus primeras palabras, sus primeros pasos, su primer año...
Es un cambio fuerte, pero estoy tranquila porque nenita queda al cuidado de mi marido por las mañanas, por la tarde está con los dos y después queda con mi madre, así que estará muy bien.
Se que es normal sentir un poco de ansiedad por la separación, los cambios, la lactancia a demanda...pero confió en que ambas podremos superar todo esto y más, y sí desaparezco un poco es porque quiero darle todo el tiempo del mundo (o el que yo tengo) a mi pequeña.

lunes, 20 de enero de 2014

La ropa usada de bebé

No, no soy millonaria, sí, vivo al filo de la economía que en nuestra casa es, cómo dice el dicho coyol quebrado, coyol comido. Pero, no comparto la moda de vender  la ropa que mi hija ya usó, y menos aún comprarle ropa de segunda mano y tampoco soy muy fanática de recibir ropa de segundas nupcias, excepto que sea de alguien cómo mi amiga la Nena.
El fin de semana pasado sacamos toda la ropa de Nenita y la que heredamos de la Nena para devolvérsela. Yo clasifiqué la ropa en tres categorías: nena (que aunque va a tener un boy puede usarla para una hermana), guardar (por sí tengo otra hija, o una sobrina algún lejano día) y para regalar.
Y cuando digo regalar es para una persona que la necesite de verdad, que tenga una necesidad  fuerte y no para l que me pasó a continuación: una chica pregunta en fb sí alguien puede ayudarle a su vecina que está a punto de tener bebé y no tienen ni ropa para sacarle del hospital, al responderle que yo tengo ropa de niña una mujer que no conozco de nada me escribe para que se la VENDA a ella porque le sale más barato que ir a la tienda.Me indignó tanto que le puse que no pensaba vender la ropa de mi hija, entonces me la pidió regalada y que se la envíe ¡Por correo!...no querías algo más??
A mi parecer, y respeto a quiénes lo hacen, vender la ropa de bebé es como lucrar con algo muy personal y muy delicado. Me parece irrespetuoso ver cómo hay mamás que venden un traje casi al mismo precio del que compraron porque "no quieren perder la inversión" y se convierte el crecimiento de sus hijos en un negocio sobre el que se obtiene beneficio económico.
Y no me gustaría comprar ropa de segunda (yo usé las de mis familiares cuando crecía y comparto con mi hermana ropa,e incluso he comprado ropa de segunda pero ya adulta) porque no se quién la uso, como la cuidaron ni que pueda traer (químicos, bichos, olores) y una que es delicada pues ya se siente inhibida a usar ropa de otros que ni conoce. Y pide comprobar como hay gente (está del mensaje me pidió ropa regalada "aunque no sea de la talla de la bebé" ) que ha encontrado en este intercambio un negocio, vendiendo la ropa que otras mamás les regalan para, cómo ellas mismas dicen "no tener que trabajar".
A esto hemos llegado!

jueves, 16 de enero de 2014

La exagera-mami

Ser mamá es una locura, ya sabernos, pero hay mamis que pueden parecer un poco más intensas. Yo a esas les digo las exageramamis y están pululando por mis alrededores, algunas veces contagiada de sus locuras y otras intento huir a toda prisa de ellas.
Porque las exagera mamis son un grupo creciente, capaz de unirse y juzgarte sí no sigues sus curiosos rituales, y lo primero que hacen es unirse contra el enemigo común, aka cualquiera que no ayuda sus estrictas normas, por eso hay que identificarlas para no ser víctima, o peor, una de ellas!
(Y no hay afán de ofenda en este post, es sólo mi visión personal)

La exagera mami se reconoce por su obsesión por la salud, la limpieza extrema, los consejos no solicitados y la crítica hacía todas las demás madres.
Así, he visto a las exageramamis prohibir a sus nenes comer cualquier clase de dulce, pastel o refresco y cuando van a una fiesta de cumpleaños los pobres niños andan súper desorientados viendo al resto de los invitados zamparse de dulces y gozar golpeando la piñata mientras ellos comen  frutas de un tupper y su madre despotrica contra los anfitriones por no considerar a sus pobres hijos que son discriminados por sus hábitos saludables y nunca más les llevan a ningún cumpleaños.
Pero lo peor es cuando la exagera mami es la anfitriona de un cumpleaños, ahí nos condenamos a una tarde de palillos de zanahoria y apio, humus y agua de limón sin azúcar mientras los niños usan juguetes educativos y los padres no exagerados son arrinconados por alguien que le habla de pañales de algodón orgánico y tintes de ropa que se carga el diablo.
En el parque las exageramamis sin fáciles de identificar: están al lado de sus hijos de casi diez años para que no se caigan del tobogán ni se raspen las rodillas en los juegos, llevan su fruta picada en tuppers y cuando se acerca el carro de los helados sus hijos se deben conformar con un vaso de leche de arroz porque los helados son de leche de vaca y ahora resulta que es venenosa, da mil cosas y vaya usted a saber que cochinadas tienen los helados.
Las exagera mamis tienen no uno sino dos pediatras y una obsesión con el teléfono y el internet, apenas creen ver un signo de alerta corren a llamar al médico después de revisar en mil páginas sobre la enfermedad, los síntomas y las posibles medicinas que los médicos recomiendan. Y aunque juran que jamás toman una decisión sin consultar al pediatra, sólo les faltan doce créditos para ser farmacéuticas y andan recetando abrilar, fluomicil, gripe water y una lista enorme de medicinas que "son buenisimas" a fulanito se la mandaron, pero yo por las dudas llevo siempre a zutanito con el pediatra, una tos de dos días ya puede ser neumonía.
Y me puedo extender en sus descripciones, pero una también es un poco exagerada y tengo que ir a filtrar por quinta vez el aya con la que le hago la cena a nenita (sarcasmo on)

viernes, 10 de enero de 2014

Primer intento fallido de potty train

Yo, inocente, creí que la operación pañal iba a ser un tris con nenita...error en gigante!! Desde hace meses hace su caca en el baño, sabe decir caca, amanece sin pis y pasa bien seca...pero, ella quería seguir con sus pañales un buen tiempo más.
Le compramos unos bellos calzones, jugamos de ir al baño y el primer día tuvimos este esquema:

Amaneció sin orinar. Cuando la lleve al baño ya orinó en su pañal.
Nos bañamos y se orinó en la bañera.
Después hacíamos viajes al baño y la Nena negada a hacer se entretenía jugando con postales o revistas del baño. Tres idas después, hizo en el suelo. Primer calzón!
Y así vivimos tres o cuatro cambios de ropa y una siesta sin orina. Sí bien la nenita no se entera de que está mojada ni nada, sí sabe aguantar las ganas de hacer pis, pero parece que aún no estamos listas, así que lo dejamos para febrero.
Ah! Y el olor de orines no sale de las alfombras de foam! Algo para tomar en cuenta

domingo, 5 de enero de 2014

Barbies, princesas y extremos

De una vez digo: yo soy de las mamás que le dicen a su hija princesa, que ven pelis de Disney y juegan a las princesas.

Con el final de la navidad empiezan las consultas y quejas sobre los juguetes. Este año puse especial atención a las barbies y princesas, debate que surgió en facebook y que tomó tintes de cacería de brujas. No es un tema nuevo, pero ya estoy embutida en este proceso "princesa o feminista".
Y es que al leer a muchos, la opinión es tajante: jamás hay que dar a una hija una muñeca, barbie o hablarle de princesas, so riesgo de criar una mujer superficial, sin criterio y hasta caer en el riego de que la niña sea una ama de casa.
Leía a mamás que recomendaban botar a la basura cualquier barbie, muñeca, princesa, ropa rosa (de verdad un color puede definir la sexualidad humana???)  Otras que no permitían más que juguetes educativos en casa y sus hijos nunca veían televisión para no perder tiempo que podrían usar en la escuela en casa (¿He dicho que eso me parece una  cosa horrorosa?) . Y a mí cada vez la mandíbula se me quedaba más larga y los ojos como platos leyendo sobre lo terrible que yo y mi madre hemos hecho: dejar a nuestras hijas creer en princesas (sarcasmo on).
Y ni hablar de las barbies, seguramente de verlas una se vuelve anoréxica, cree que debe ser consumista y tonta. Pues no! Eso sucede porque no se nos ha enseñado algo y es a usar los juguetes para educar en valores. Mis barbies eran decentes mujeres trabajadoras, iban a casa de sus amigas, decían por favor y gracias y dejaban su casa arreglada siempre. ¿Hay algo de malo en eso? Porque yo no lo veo! Y ahí estaban mis papás hablando sobre por qué la barbie era siempre rubia (hábil, las hacen en USA y pues allá son rubios), y por qué nadie podía ser tan flaca como ellas y tener semejantes bubs, y crecí sin medio a no parecerme a la barbie aunque sí muy acomplejada por los comentarios de mis tías y vecindad sobre mis grandes bubs, o como me haría gorda. Sí , tengo problemas de imagen corporal pero me los dieron las personas, las muñecas, esa pieza de plástico duro con cabello sintético nunca me dijo nada sí me zampaba unas galletas.
Y sí, dejaré a mi hija jugar con esas escuálidas muñecas con ojos fijos y sonrisa gigante, y le enseñaré el valor de ser como las barbies, ellas son lo que quieren ser: azafatas, pilotos, doctores, enfermeras, madres... Y la acompañaré a jugar con ellas igual que mi papá, que me enseñaba a hacer una huelga con mis muñecas, o como mami que jugábamos a organizar la ropa, cuidar el bebé y leer libros. Sí, mis papás me enseñaron mucho jugando y no creo haber salido tan mal.
Del color rosa solo diré que es mi favorito, que mi hija tiene mucha ropa, pero que el rosa es su color base, y aunque a muchos no les guste, es mi color favorito junto al negro, el verde y el amarillo encendidos.
Y como dicen estos anuncios nuevos de Disney: soy una princesa! Valiente, única y extrovertida. Quiero que mi hija sepa que ante mis ojos siempre tendrá un pequeño castillo, un reino llamado mi corazón, y que  esta bien tener fantasías, soñar, amar y ser delicada sí eso la hace feliz, pero que también está bien ser valiente, osada, compartir con otros y luchar con el corazón. Y sí, sí es feliz vestida con tiara y purpurina o con jeans y tierra siempre le recordaré que en mi vida es una fuerte luchadora que tiene la sabiduría de mujeres cómo Elizabeth, Victoria o Cleopatra...y estas antes de ser iconos mundiales adivinen que? Fueron princesas